Casa Rural Huerta De Valdolazaro

Un restaurante con un entorno inmejorable. El servicio es siempre impecable y cada plato es una auténtica experiencia para el paladar. Vamos con bastante frecuencia cuando tenemos cualquier celebración familiar por qué es garantía de buen comer y disfrute. Los asados también están genial. Muy recomendable tanto por la calidad-precio como por el trato.

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Hemos pasado una noche y ha sido una experiencia muy buena los dueños majisimos, trato muy familiar …un desayuno de 10 .. volveremos. Impresionante noche de estrellas ya que no hay contaminación lumínica , sitio ideal para desconectar y tener tranquilidad

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Fuimos a comer un viernes. La comida genial pedimos el menú pero a la hora pagar el precio no coincidía con el que ponen en la página web de 14 €, nos dicen que hace unos cuantos años que no actualizan la página y que ese no es el precio actual y encima nos cobran como menú de fin de semana y también nos cobran aparte la bebida, el postre y el café, porque dicen no entra en el precio del menú. También se permiten decirnos que es que nosotros no hemos preguntado y por eso no tenemos toda la información. Pagamos la cuenta, pero nos pareció una tomadura de pelo y quererse aprovechar del turista.

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Hotel perfecto para descansar y disfrutar de la tranquilidad. Esta en medio del campo con lo cual ningún ruido molesta. Las habitaciones bastante amplias y nada de calurosas. La piscina está genial. Por la noche sentado en el porche se pueden ver todas las estrellas (nada de contaminación lumínica)

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Hoy hemos estado comiendo con la familia y hemos salido muy descontentos. Nos ha atendido una señora (creo que era la dueña) que desde el principio ha sido una antipática… Cuando nos traía los platos estaba contestando de malas maneras, poniendo malas caras y resoplando. De hecho, cuando nos ha traído los postres nos ha dicho que se estaba empezando a poner nerviosa y se veía que estaba de mala gana. Íbamos con dos niños de 15 y 10 años y hemos tenido que preguntar si a ellos no les tomaba nota porque ni siquiera les ha preguntado. La calidad de la comida era buena, pero la persona que nos ha atendido deja mucho que desear. Para trabajar de cara al público creo que hay que ser un poco más simpático y saber tratar al cliente, ya que vamos a disfrutar de la comida y pasar un rato agradable, no a sentirnos incómodos. El sitio muy bonito y rural, pero el camino de acceso está un poco difícil. No hay cobertura.

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