Restaurante Desde 1911

Extraordinario. Un sitio al que hay que ir si te gusta el pescado y el marisco. Sin duda conseguirán la segunda estrella michelin. El concepto es muy bueno, ya que se quedan cada día con el mejor género de su empresa matriz Pescaderías Coruñesas, algo que les garantiza la mejor calidad ya que mueven entre 8 y 10 toneladas de producto al día. La carta de vinos es muy extensa y el maridaje con muchas posibilidades. Nosotros fuimos a por todo, 6 entrantes más principal y gran maridaje. Salvo que seas de mucho mucho comer es excesivo, no te permite disfrutar de los quesos y postres como deberías. Los carros de quesos un espectáculo y los postres igual, todo muy cuidado. Por poner un pero, me parece totalmente inadecuado cobrar 5€ por persona en concepto de pan y aperitivo ¿? Sinceramente esta parte no la entendí, en un restaurante de este nivel es un detalle muy feo que evidentemente no implica nada desde el punto económico pero afea la experiencia.

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Un auténtico placer gastronómico. Con su primera estrella, el restaurante 1911 confirma que es mucho más que un lugar para comer: es toda una experiencia. La forma original de presentar y elegir el menú sorprende y atrapa desde el inicio. El espacio, de diseño elegante y cuidado hasta el último detalle, junto con su preciosa terraza, crean un ambiente único. El servicio es atento, profesional y discreto, a la altura de la propuesta culinaria. Elijas el que elijas, cada plato es un acierto. Una experiencia de 10, absolutamente recomendable.

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Espectacular restaurante, lo recomiendo 100%. Decidimos celebrar nuestra cena de Bodas de Lino, 4to Aniversario y no pudimos hacer mejor elección. Todo el equipo fue muy especial, un trato muy singular de la camarera PAMELA (atenta, condescendiente, agradable y carismática, actitud que la hacía encajar perfectamente con nosotros); nos hizo sentir muy a gusto durante toda la cena. La comida inmejorable, el producto super fresco y de calidad exquisita, nos encantó la elaboración y la presentación de la cigala, pero todo estaba perfecto. Tuvieron cortesías por nuestro aniversario; nos obsequiaron un mandril con una postal y un postre fenomenal por la casa con una vela, gesto de verdad inmortalizó el momento. Respetiremos la visita, ojalá todos los sitios tuvieran ese nivel de profesionalismo y detalle, los animo a visitar el mejor restaurante de Madrid para mi: Desde 1911. No vemos pronto!!!

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Una experiencia gastronómica de principio a fin. Desde 1911 es mucho más que un restaurante de tres estrellas: es una celebración de la cocina bien hecha. El espacio combina modernidad con una calidez acogedora que te hace sentir especial desde el primer minuto. El menú es extenso y pensado para disfrutar sin prisas —recomiendo venir con buen apetito. Cada plato, desde los entrantes hasta los postres, está ejecutado con un nivel de detalle y precisión impecable. Se nota la excelencia en cada bocado. Y si eres amante del queso… prepárate. El carrito final es un auténtico espectáculo, tanto por variedad como por presentación. Un broche perfecto para una velada inolvidable

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Sitio excelente. La atención de primera. Los productos de primera calidad. Elegimos el Menú 4+1 y fue suficiente o más, hay q considerar de que tras los platos del 4+1 vienen los postres de queso y chocolate que podrías comer solo con eso de lo abundante que es. Te sale a 250 € por persona pero lo vale cada euro con creces. El único problema es que cuesta reservar, porque si no iría más veces al año.

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