El Balcon

PÉSIMO SERVICIO. Para no volver. 1 hora en salir el primer entrante, y eso que uno de ellos era paté y eso conlleva poca elaboración . Al terminar de dar la comida los camareros desaparecen, tenemos que ir en busca de ellos para que nos diga los postres, dice que nos llevará la carta y después de media hora decidimos entrar a pagar porque la espera ha sido interminable con cada cosa. Nada recomendado

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Fuimos 9 personas el sábado y comimos estupendamente; solo como apunte, la pipirrana estaba un pelín salada, pero igualmente muy rica. Quería destacar la amabilidad y profesionalidad de las camareras que nos atendieron, siempre con una sonrisa y muy simpáticas. Muchísimas gracias.

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Hacia tiempo que no tenia una comida tan desastrosa. Más de 1 hora de reloj de espera hasta que aparecieron los primeros platos. El arroz nos dijeron que tardaba 45 minutos y solo se equivocaron en 1 hora, fue 1 hora y 45 minutos!!! Servicio muy poco profesional, de los que no miran... Cocina desbordada. Un desastre. A mí no me pillan más...quizás cuando tenga tiempo y me jubile.... No vuelvo. Arroz muy salado. Lo único que salvo son las migas y quizás sea porque después de una hora me cogió con hambre.

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Espectaculares vistas panorámicas a las montañas y los olivos. Probamos la pipirrana, las migas, el ciervo en salsa de la abuela y el codillo (todo estaba riquísimo). El salón tiene dos chimeneas que crean un ambiente muy acogedor.

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Hicimos nuestra celebración de boda en el Balcón, queríamos un sitio con cocina propia, buena, de calidad y tradicional. Realmente fue lo que buscábamos. La decoración y extras los pusimos nosotros. He tardado tanto en poner reseña ya que han tardado mucho las fotografías de boda. Todo muy bien, muy contentos por lo que nos han transmitido los invitados. Sí que los tiempos se fueron retrasando pero al tratarse de una boda el retraso ya no fue por el restaurante si no por los novios, las sorpresas y demás interrupciones que introdujimos nosotros. Las vistas preciosas, hasta asturianos se quedaron impresionados, nos dijeron que no pensaban que Jaén era tan bonito. Quiero agradecer especialmente a Rafa el dueño todo su esfuerzo para que saliera bien y que en ningún momento ponía pegas o impedimentos a todos los cambios y peticiones que hacíamos. Y a Ana, jefa de cocina, que todo lo que hace está buenísimo. Super atentos y amables ambos. Estamos enormemente agradecidos con ellos.

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