Ca la Neus

- La singularidad - La costumbre es la valoración en función de la norma. Somos pocos y aún menos los lugares que parecen regirse de acuerdo a conceptos menos formales, más humanos. En definitiva, cualidades poco mesurables (qué puntuación le das a un abrazo?) y que, por tanto, cuestan integrar en guías y constelaciones. Ca La Neus es un anhelo que emana exceptuación. El salón, diáfano, ha permeabilizado el carácter de quien lo regenta. Amplio y cálido. Aquí las mesas son compartidas, y desnudas. Pocas sillas son iguales, alegoría perfecta del que se sienta. No hay carta. Es una sorpresa, como el que atiende en celebración a casa del compinche. Sin corsé, en lo que había sido la mercería. Jaume abre una botella tras otra. Bebe, prueba! Nada importa. Y esa es la metáfora aquí. Amigos que eran anónimos alrededor de una mesa sin mantel mientras circulan promesas. Y copas. Y Duralex.

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Ambiente familiar. Tendrás a tu disposición un chef como en casa. La crema de verduras exquisita, tenía un punto ahumado. Las albóndigas con guisantes mummmm. La paella de marisco muy sabrosa. Si pasas por la zona visitar Ca la Neus.

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Expectacular atencion del Jaume!!!! Estas como en casa.

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Excelente experiencia, sin duda una visita forzosa si pasas por aquí! Servicio y comida de 10!

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Un gran acierto pasar por este lugar tan encantador. Se nota cuando alguien cree en lo que ofrece en su negocio y eso se traslada al cliente sin esfuerzo alguno. Aunque solo hemos podido probar una pequeña parte de la gran variedad de vinos y cervezas artesanales que tienen, nos sobra para saber que tienen muy buena selección de la zona. Sobre la comida...van sirviendo lo que van sacando de la cocina, y TODO estaba espectacular, cocina tradicional de la que te hace disfrutar. Felicidades y enhorabuena por este rincón con tanta personalidad! Hasta pronto y esperamos volver.

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Un lugar entrañable. Muy buena comida y muy buen trato del dueño. Hay que dejarse sorprender por el comensal. Todo buenísimo. Buenos vinos y cervezas artesanas. Vamos que saldrás satisfecho con la oferta. Eso sí hay que espabilar con la hora porque cuando se acaban los platos te quedas sin comer

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